martes, 23 de agosto de 2016

Mamadas soñadoras

Hablemos de ese sentimiento
que abunda, inunda
en lo más profundo 
de tus cimientos.
 Hablemos de caladas,
de folladas, de mamadas
a ciegas dadas.
De ciegos y fumadas 
de sonrisas cansadas.

Hablemos de fingir
de sentir hasta revivir
en un mundo 
donde soñar es existir.
Un mundo donde amar 
es gemir, donde
el calor de otra persona
es muerte en elixir.
 Un mundo donde la duda
es saber donde elegir,
el beso que sea sentencia 
y el arma que esgrimir. 

Un mundo donde los libros
comienzan por el final,
donde las palabras dichas
cortan como el cristal.
Donde el cielo llora 
por la falta de existencia,
de soñadores despiertos
sin pesos de conciencia.
Donde la lluvia empaña,
apaña, empalma, araña
ese corazón disperso, 
soñador, atrapado en telarañas.

Y si el polvo perfecto existiera
yo me lo esnifaría.
Y si mi razón se perdiera
en tu entrepiera la encontraría.
Porque vivir no es la cuestión,
dormir cada día en el mismo colchón.
Colapsado de ilusiones rotas
y caladas cortas.
De suspiros sin respiros 
y mares muertos en rocas.
De piedras enamoradas 
de un camino abierto de piernas.
De sombras follando cavernas.

De horas preñadas de espera,
de mordiscos en tus caderas.
De tu lengua recorriendo mis piernas.
De tu amor sepultado en mi pecho,
enterrado, encerrado junto a tu lecho.
De costillas rotas y cosidas,
de correrse a escondidas.
De recorrer distancias a base de caracteres,
de apagar las velas y darnos a los placeres
de una vida y media esperando
a que tus pasos vuelvan a tomar el mando.
A que tus esperanzas revienten el asfalto,
ese que te impulsa y saca los clavos
de un reciente pasado,
que te pisa las huellas que juntos...
hemos dado. 

jueves, 16 de junio de 2016

Galaxias

Cuando surge esa chispa que encandila,
echas de menos
pero no lo asimilas.
Verle y que tu deseo se desquite,
que te bese, que no explique.
Que soñéis y que explote,
que llegue al techo y rebote.
Que ría y casi pote,
que lo que sintáis sea solo el roce;
la mirada en el escote
que vuestras almas choquen.
Que el humo sea solo de trenes, de cigarros,
que sea las hondas de tu guijarro.

Que las ventanas se empañen
que folléis, que no te engañe.
Que las prisas te quitan el hambre
que las caricias no solo dan calambre.
Que su aliento te revoluciona, te excita
a pesar de no haber tenido citas.

Lo más jodido es la distancia,
follarse más carreteras que camas,
suspirar a solas,
vislumbrar entradas
sin salida ni escaptoria,
dar vueltas sobre una noria.
Ser su heroína y salvarle por un pico,
luchar en su almohada morir en su abismo.
Contar sus lunares como si fueran estrellas,
hilarlos, construir en sus ojos galaxias
crear planetas.
Amaneceres y auroras en su entrepierna,
todo empieza cuando calienta,
cuando tu mundo no para y solo da vueltas.
Cuando el infierno se convierte en cielo
y el cielo en sentencia.
Cuando lo que te pone cachonda 
se llama paciencia,
cuando el universo oscurece 
y en el límite de su piel perece.


sábado, 11 de junio de 2016

Sueños y mamadas.


La llamaba Insomnio, 
porque a él le gustaba dormirse en sus ojeras.
Columpiarse en sus vértebras,
soñarse entre sus rejas,
hechas de costilla y arena.

De finales va el asunto, 
de principio creyéndose astuto.
De sentimientos a pie de muro
de alientos bebidos cada segundo.
De Primaveras etílicas
que empiezan y nunca acaban,
de sueños construidos a base de mamadas. 
De caminos que bifurcan, que estampan,
de ilusiones empadadas,
de caminos de baldosas verdes, fumadas. 
De historias empezadas, 
que aburren,
que cansan.
De rutina clasificada, moralidad ordenada,
diversión apagada.
Y es que se terminaron los cuentos de hadas,
que se cuentan en la cama.
Ahora llegan los cuentos a medio plazo,
con perdices hipotecadas.

Insomnio la llamaba, recuerdos que nunca llegan
que siempre se apagan.
De cielos en escala de grises,
de miradas nubladas,
de mentiras dignas de actrices.
De polvos con sabor a hierro,
de besos con sabor a cenicero.
De párpados caídos y sonrisas en vuelo,
de pájaros en el coño y en la cabeza...hielo. 
De pasos en falso pero sin miedo,
de abismos caídos del cielo.
De sorpresas sin cumpleaños, 
de besos sin aniversarios,
de paciencia sin estragos,
de amor sin halagos.

De pegarse viajes sin moverse del sitio,
recorrer sus carreteras, arder en su camino.
De perseguir su viento y acabar en su boca,
lanzar los dados y ver qué nos toca.
 Si de tocar habláramos, 
tu polla gritaría con voz rota
que el amor llega
y nunca sabrás cuándo explotas,
cuándo te corres, 
cuándo llegó la derrota,
 cuando su reloj 
se folló a tu hora.




martes, 10 de mayo de 2016

Comidas de coño

Que si perdemos que sea la ropa,
no palabras que ya poco importan.
El mundo se esconde en el boca a boca
tu mundo te aplasta como una roca,
mientras te sigues preguntado si estás loca.
 Si por loca se entiende como esos sueños
que te empapan, te imprengan,
eso que sientes como pájaros sin dueño.
 Y sigues sin entender las paranoias
esas que asustan, que acojonan.
Y sigues dispuesta a seguir creyendo,
a no tener límites ni creer en cuentos,
sigues dispuesta a seguir sufriendo.

Y poco a poco todo comienza a dar vueltas,
esas que marean y desorientan,
esas donde la habitación se convierte en cama,
donde la esperanza se torna almohada,
donde no paras de correrte a base de ausencia de escamas.
Esas que se desquebrajan, que cicatrices dejan
esas que son directrices de noches asesinadas 
que ya no se quejan.
Y todo sigue dando vueltas, en torbellinos desesperados,
en sábanas caducadas, en cielos despejados,
en muertes truncadas.

Vuelta a empezar y aquí siguen,
comiéndote más la cabeza que el coño,
muriendo cada primavera, renaciendo en otoño,
maltratando los recuerdos, convirtiéndolos en polvo.
Y de polvos trata el asunto,
de esos que te dieron con un final y un punto.
Tantos momentos descubiertos estando juntos,
sin pasado, sin presente...solo futuro.

Y aquí seguimos persiguiendo pesadillas,
transformadas en conejos blancos.
Tazas de té y relojes rotos,
menudo país de maravillas,
lleno de folladas rápidas y besos cortos,
de caricias prohibidas y silencios rojos. 
Y aquí sigo, suspirando huracanes
creando tormentas internas
rompiendo espejos en los ojos,
llorando mierda que he tragado,
fumando la mierda que tú me has dado,
compartiendo sonrisas con fantasmas del pasado.
Gritando a los siete vientos que nunca me has amado. 

jueves, 18 de febrero de 2016

...

Hacer recuerdos por las calles de Madrid,
aspirar el humo de tu cuerpo,
esnifar nuestros polvos, mantenerlos en el recuerdo.
Acariciar tu espalda, ronronear en tu cuello,
abrir tu mente, encerrarla entre mis piernas,
susurrarte al odio un "te quiero".

Romper las cadenas, volar a voz en cuello,
librar una guerra, perder el desasosiego.
Parar las veletas, los relojes, suspender el tiempo.
Romper la espada, el escudo, corromper el templo.
Arrancar las flores, deshacerme en tu mitad, en tu entero.
Enterrar el calendario, el pesar, el miedo. 

Recorrer puentes, cruzar caminos, perderse en el vuelo. 
Apagar las miradas, avivar el fuego, soplar las cenizas, cambiar de color el cielo.
Agarrarte la mano, escudarme en tu abrazo,
perecer, sucumbir, morir, deambular en tu viento.
Soplar las estrellas, contar las velas, detener el cuento.
Contar gaviotas, sumergir barcos, entretejer las olas.

Surcar la distancia, encarcelarme en tus costillas, coser los agujeros.
Flotar en tus abismos, acostarme en tus  miedos.
Maldecir entre besos, gemir entre rodeos, 
navegar entre sábanas, dormir entre conversaciones, gritar entre truenos.
Porque...te quiero. 

sábado, 23 de enero de 2016

Relojes y tiempo.

https://www.youtube.com/watch?v=sp1UgS044cA

Ella quería que él le soltara el pelo, que enredara sus dedos, que buceara en sus bucles.
Ella quería besar su aroma, respirar su cuello.
Ella quería reptar distancias, ahogar esperanzas.

No había mayor cárcel que su mente, mayores barrotes que sus responsabilidades.
Él era la mano que podía abrir la jaula, el padre de una libertad ansiada.
Él era inspiración y verdugo, 
ella tren y estación.
Él lluvia y cielos grises,
ella noches sin luna,
él piano sin canción. 
 Ella bosque sin hojas,
él primavera sin pasión.

El tiempo, juez y captor,
todo demasiado tardó.
Se retrasaron los besos, los momentos, los recuerdos, los sueños, las canciones.

Ella terminó, él sentenció.
La tinta desbordó el papel y lloró,
los besos quedaron en suspensión, los polvos pactados sucumbieron
a la locura de una vida distinta, en unos labios distintos, en una cabeza distinta.

El tiempo ajustició, reloj muerto declaró.

domingo, 31 de mayo de 2015

Día 5.

Lo que daría por parar el mundo, el reloj, la veleta, el tren y la estación.
Lo que daría por un día eterno y perpetuo en nuestras cabezas.
Lo que daría por un beso cualquiera, de esos que se dan sin pensar.
Lo que daría por una caricia abierta de piernas.
Lo que daría por siete vidas y media de gato.
Lo que daría por pisar tu Oniria, besar a tu Morfeo y follarme sus polvos.

Lo que daría por darte mi parte, mi mitad, mi entera.
Lo que daría por lucharte, ponerte entre la espada y mi pared.
Lo que daría por pensarte mientras te miro los labios.
Lo que daría por morirme entre tus brazos y renacer en tus manos.
Lo que daría por una noche, una luna o media.
Lo que daría por estrellas fugaces, eclipses y amaneceres contigo.
Lo que daría por recorrer caminos, autopistas, planetas y lunares.

Lo que daría por ti...